http://www.eldeber.com.bo/2009/2009-03-19/vernotacolumnistas.php?id=090318225256
Excelentes directrices para relanzar la industria que debería ser nuestro principal trampolín al desarrollo:
Boris Gómez Úzqueda
El reciente escándalo que involucra a la ex principal autoridad ejecutiva de la compañía estatal de gas y petróleo muestra la punta del iceberg de la descomposición a la que llegó el país.Está plenamente comprobado que la ‘nacionalización’ fracasó. Ahora, con la nueva Constitución, urgen concertaciones para relanzar el sector que da de comer al país.Es tiempo de que desde el Estado se promueva el debate de líneas maestras para lo que debe ser la nueva ley de hidrocarburos, sustentada en una Nueva Política Energética (NPE).Que el Presidente convoque de manera inmediata un Consejo Nacional de Energía e Hidrocarburos (CNEH), compuesto por sociedad civil, técnicos, empresarios, prefecturas, municipios y ciudadanos notables.El CNEH tendría la misión de: a) elaborar la NPE de Bolivia para los próximos 20 años, señalando cuál será la visión de país; b) establecer las líneas de acción en inversión multinacional para la exploración de áreas tradicionales y nuevas; c) reestructurar YPFB y convertirlo, en un plazo máximo de seis meses, en una corporación económicamente activa, con mentalidad transnacional y servicio social; d) abrir las puertas de Bolivia para facilitar la intervención de compañías internacionales en procesos de desarrollo de nuevos campos y producción, bajo el esquema de asociación de riesgo accidental con el Estado y con las actuales compañías operadoras; e) elaborar las líneas maestras para la modernización del proceso de refino, invitando para ese fin a compañías extranjeras con experiencia; f) elaborar los proyectos de ley de hidrocarburos, de nuevas energías y de electricidad, y alistar el marco legal adecuado para ser aprobado en la Asamblea Legislativa (ex Congreso); g) preparar los documentos adecuados que reformen las compañías ex capitalizadas, manteniendo sus niveles de acción o planteando un cambio de timón.Adicionalmente, se debe: h) elaborar perfiles de negocios GTL gas a líquidos y promover inversiones específicas; i) establecer proyectos técnicos con multinacionales en futuros negocios de petroquímica de segunda generación; i) reformular la matriz energética basada en gas, promoviendo con el sector eléctrico nuevas agendas de cogeneración; j) formular proyectos en LNG (liquid natural gas), relanzando ideas y complementando con proyectos de apertura de nuevos mercados; k) estimular la investigación interna y la suscripción de acuerdos comerciales con compañías para mejorar las condiciones de logística de transporte de combustibles al interior del país; l) estimular proyectos internacionales para el tendido de gasoductos y líneas de electricidad; m) iniciar debates sobre biocombustibles y nuevas energías a partir del gas como el ‘di methil éter’, invitando para ello a expertos y a países con experiencia; n) institucionalizar todos los cargos de YPFB y del Ministerio de Hidrocarburos, con personal técnico cualificado alejado de angurrias partidarias; o) proponer líneas de negociación con las actuales compañías operadoras de campos para que los desarrollen bajo nuevas condiciones, en las que YPFB sea un asociado en negocios de valor agregado; p) incorporar al debate sobre el sector a gobernaciones en cuyas jurisdicciones se encuentren las reservas de gas y petróleo; y q) declarar a Bolivia centro energético continental con la posibilidad de que compañías serias vengan, investiguen y propongan negocios compartidos en toda la gama de industrialización a escala.
* Máster en administración de negocios y consultor del sector de hidrocarburos y energía
jueves, 19 de marzo de 2009
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